Consejos para caer bien al jefe

Ser siempre humilde, respetar a todos y aportar nuevas ideas
Siempre debes tener buena relación con tus superiores y más ahora que la vida corre. Una de las ventajas de llevarse bien con el jefe es que éste pueda valorar más de cerca nuestro esfuerzo en el trabajo. Ser humilde, respetar a los compañeros y aportar con nuevas ideas, es una ventaja única.

No temas Si tu jefe te llama a conversar con él (No necesariamente será por algo malo). Procura que no tiemblen tus piernas, ni tampoco sudes. Solo relájate, escucha tranquilamente y muy atento.

No te pases: Intenta crear una buena relación con tu jefe, cercana pero sin caer en lo vulgar ni en los amiguismos. ¡No seas confianzudo!
Escucha y atento: Lo más probable es que tengas mucho que aportar con tus conocimientos y por tu formación. Pero siempre escucha y silénciate aunque el tema ya lo sepas o manejes.

Apóyale sólo cuando creas en ello: : Dale la razón o apoya sus propuestas si de verdad “crees” en ellas. Si ves que existe algún error, díselo, no calles, porque para mover la cabeza afirmativamente en todo ya están “los idiotas”.
Juégatela: Un empleado empeñoso es una gran virtud, con garra, valientes, con pasión por su trabajo y que están dispuestos a asumir riesgos para evolucionar y que las cosas sigan su transcurso y que no se queden paradas toda la vida.
No pases a llevar a nadie: Lo más probable es que no todos tus compañeros de trabajo te agraden, pero tampoco le vayas al jefe con el cuento. No andes quejándote, menos insultos o comentarios sobre los demás, una porque habla mal de ti y otra que a los jefes no les gusta los rumores y cahuines.
Potencia la experiencia: Podrás llevar años en la misma empresa, pero seguro que alguien te supera en antigüedad. Intenta acercarte a estas personas y potenciarlas, porque la experiencia es todo un grado y un requisito fundamental para tener éxito en los negocios.
Humildad: Admite los errores, no intentes esconderlos y mucho menos endosárselos al recién llegado o practicante.
Conoce tu ambiente: Trabajar en equipo es una de las cosas más valoradas en las empresas, pero también un buen ambiente de compañerismo. Pon de tu parte en conocer a todos los que te rodean, no solamente el nombre o el cargo que ocupan.
Conviértete: Acércate al jefe conócelo y conviértete en su mano derecha, ayúdale en todo, conviértete en imprescindible para él, pero no es un perro faldero. ¡Pero ojo! Ve los limites.